Presenta el Amador Diez 2017, la segunda añada de este verdejo cuvée especial prefiloxérico elaborado con uvas seleccionadas de viñas de pie franco de Segovia y Valladolid; se han elaborado 3.000 botellas
Düsseldorf, 18 de marzo de 2019. Catadores e importadores de los principales mercados vitivinícolas han conocido en exclusiva esta semana en Alemania la segunda añada de un vino que desde hace dos años se ha hecho un hueco entre los vinos de alta gama más prestigiosos de España. Amador Diez 2017, marca que lleva el nombre del que fuese presidente de la bodega durante dos décadas, una de las figuras más respetadas de la DO Rueda, es un vino ya listado en las cartas de grandes restaurantes y muchas de las mejores tiendas especializadas del mercado nacional y también internacional.
Se trata de un vino que representa una vuelta a los orígenes de Rueda en constante respeto por la tradición y el entorno natural de los viñedos más viejos de la Denominación de Origen Rueda. Amador Diez es un vino único ya que se elabora con una materia prima muy escasa: una selección de las mejores uvas procedentes de los viñedos más antiguos de la Denominación, prefiloxéricos, centenarios, y que en 2017 sumaron un total de 10 hectáreas de los socios viticultores entre la provincia de Segovia y Valladolid. Vinificado con el objetivo de favorecer su longevidad, es idóneo para su consumo en la actualidad y con gran potencial de envejecimiento en botella, cualidad muy apreciada por los importadores dado que favorece su consumo futuro.
Esta nueva añada convivirá en el mercado con la de 2015, de una producción igual de limitada y cuyas ventas se han llevado a cabo por cupo dado el reducido número de botellas disponibles. El enólogo Roberto L. Tello, que junto a Elena M. Oyagüe ha continuado el legado de Ángel Calleja, enólogo durante cuatro décadas de Cuatro Rayas, fue el encargado de presentar a importadores de productos premium de todo el mundo, los cuales hicieron una degustación de ambas añadas.
Cata vertical
Este verdejo cuvée ha sido batoneado con sus lías durante ocho meses en barricas nuevas de roble francés de 500 litros. “Tiene un color amarillo pajizo. En nariz predominan aromas varietales, destacando fruta blanca, cítricos y anisados. Su paso por barrica aporta delicados aromas dulces como coco, vainilla y otros más complejos como palo de regaliz. La boca es muy fresca, grasa e intensa dejando recuerdos varietales”, explicó L. Tello en Dusseldorf. La añada 2015, de la cual apuntó todavía tiene un largo potencial de envejecimiento, ha evolucionado muy positivamente desde su presentación hace 24 meses. “Tiene un tono dorado pálido y una nariz compleja donde aparecen aromas varietales, de fruta blanca compotada y amielados, en perfecta sintonía con aromas a toffe y frutos secos, aportados durante su estancia en barrica. En boca sigue destacando por su frescura y untuosidad. Es muy largo, dejando intensos recuerdos varietales y de frutos secos”, aseveró.
Cumbre mundial del vino
La Feria del Vino y Bebidas Espirituosas ProWein, que se desarrolla en Düsseldorf desde el domingo hasta este martes, es el mayor escaparate del mundo del vino. Se trata de un evento de periodicidad anual dirigido a profesionales de los sectores vitivinícola y de otras bebidas alcohólicas y es la más importante en su categoría por su especialización. Constituye un punto de encuentro imprescindible, que reúne en su convocatoria a más de 6.000 expositores procedentes de 60 países y que registra en torno a 60.000 visitantes de más de 120 naciones.