El tapón de rosca, tan menospreciado en nuestro país y tan alabado fuera de nuestras fronteras… ¿Por qué? Hablemos de vinos blancos españoles, hablemos de vinos blancos australianos por ejemplo. Hablemos de la conservación de esos vinos con screwcap, o tapón de rosca.
Hace muchos años que la industria del vino lucha por optimizar la conservación de los vinos, y en el caso de los vinos blancos, se ha llegado a la conclusión de que tanto los tapones sintéticos como los tapones de rosca ayudan a mantener la frescura, la fruta y los aromas de estos vinos, en definitiva, evitan su oxidación.
En nuestro caso, países como Reino Unido, Holanda o Alemania, nos demandan el Verdejo Cuatro Rayas con este tipo de tapón, de hecho, su utilización nos ha ayudado a posicionarlo en tiendas especializadas de gran renombre. En el caso de Australia o Nueva Zelanda, prácticamente no se concibe un vino blanco sin screwcap o, en su defecto, tapón sintético. Desde luego, lo que se evita en todo caso es el corcho natural.
El mercado nacional español es muy diferente en ese sentido. Si bien es cierto que el tapón sintético ha sido aceptado por la inmensa mayoría, no ocurre lo mismo con “la rosca”. Aquí somos más conservadores y reticentes en ese aspecto. Nuestra bodega elabora la mayoría de los vinos con tapón sintético, pero no se escapa la oportunidad que ofrece los tapones de “abrir y cerrar”. Por esta razón, hemos lanzado al mercado una marca que se comercializa exclusivamente en formato rosca, Poema Verdejo y Poema Joven Tempranillo. Con ellos se pretende testear el comportamiento y la evolución en el consumo en cada canal de venta en España.
Parafraseando un artículo de Tyson Stelzer, “lo verdaderamente romántico a la hora de disfrutar de un buen vino es lo que está dentro de la botella y con quien la compartimos, y no la forma de abrirla”.
¿Qué os parece?
Felices días